Afiliada a cooperativas de compras para adquirir azúcar y harina en escasez, la clan constató que «toda la estructura estaba en manos de judÃos, todos los vendedores eran judÃos, y pude ver con horror que aquà nulo se hacÃa en beneficio del pueblo, sino que todo era manejado para el beneficio de la clase faba», justifica su